Volver y ser mejores: fin de la vacaciones

¡¡Estamos de vuelta!! Queridas vacaciones cuánto las deseamos y qué rápido se pasan. Y que pronto las olvidamos cuando volvemos a la rutina. Te ha costado volver? Empezar a trabajar? El cole de los niños?…

Creo que es normal que nos de un poco de pereza volver a lo mismo de siempre. Pensar que otra vez llega la rutina, los días sin emociones, con el piloto automático puesto, mientras la vida pasa.

 

Me gustaría que este nuevo curso fuera diferente, me gustaría que en unos meses no me diga «que rápido se ha pasado».

Me gustaría poder disfrutar del día a día y en la medida de lo posible, introducir cosas nuevas que nos hagan las semanas un poco más emocionantes. Planes en los fines de semana, alguna actividad distinta entre semanas, un cine o una cita en miércoles…

 

Sé que no es fácil lo que estoy diciendo pero si ni siquiera nos lo planteamos, este año pasará igual que el anterior.

Y eso no puede ser.

Este año tiene que ser diferente, tiene que ser mejor.

 

Un ejercicio que estoy empezando a hacer es, disfrutar de ir al trabajo, de volver a casa, de ir a la compra… Es decir, tomarme el camino como un paseo, no como una obligación.

Disfrutar de ese paseo, fijarme en los edificios, en las personas…

En el fondo se trata de estar presentes y vivir lo que estamos haciendo, no pensar en lo que ha pasado o en lo que haremos después.

 

Otras cosas que podemos hacer es comer sin distracciones, no tele, no móvil, no radio. Ser más consciente de la comida, de la compañía.

Leer un buen libro.

Escuchar una canción y disfrutas de su letra

Bailar

 

Pero, también creo que, esto cada vez es más difícil, cada vez hay más ruido fuera y dentro de nosotros, cosas que  nos distraen y nos impiden simplemente estar y ser.

 

Hay muchas cosas que nos ayudan a eliminar ese ruido entre ellas por ejemplo la meditación o el ejercicio.

 

Pero lo que he visto es que para poder reducir ese ruido, para poder estar más presentes y evitar distracciones necesitamos que nuestro cerebro funcione bien, necesitamos que sea capaz de diferenciar ese rudo de lo que de verdad importa.

 

Y para que esto suceda, es necesario que nuestra columna vertebral este en un estado óptimo para que de esta manera nuestro cerebro realice todas las conexiones perfectamente.

 

Ahora te cuento mi experiencia y la de cada vez más y más personas que pasan por la consulta.

Pero antes voy a repetirme en lo que muchas veces ya he comentado y es que:

 

La quiropráctica no es solo para el dolor de espalda, es mucho más. Nos ayuda a que nuestro Sistema Nervioso y todo nuestro cuerpo funcionen al máximo.

 

Por eso cuando nos ajustamos nos sentimos:

  • Más relajados
  • Más presentes
  • Más capaces de afrontar el estrés diario
  • Más concentrados
  • Mejores reacciones a los problemas
  • Con mejor humor
  • Con más vitalidad y energía
  • Con capacidad de hacer más cosas

Me encantaría ayudarte a que este curso sea diferente para ti. Que sea más consciente, más tranquilo y más sano.

Que ajustar tu columna se convierta en un nuevo hábito para ti y que te ayude a mejorar en todos los aspectos: físico, mental y emocional.